¿La sanidad pública está enferma?
¿La sanidad pública está enferma, se deja morir o todo son meras apreciaciones erróneas de los pacientes?
El sistema sanitario español se ha convertido, sin duda, en uno de los mayores logros de varias generaciones, la envidia de otros estados con menor cobertura. Así lo avalan informes como el elaborado por la Fundación Bill y Melinda Gates. Según sus resultados España ocupa el octavo peldaño en el ranking sobre acceso y calidad sanitaria pese a la entrada en vigor del Real Decreto-Ley 16/2012 que restringe la cobertura a los inmigrantes no registrados, con excepción de los servicios de urgencias y materno-infantil.
Expertos más que optimistas señalan un “aumento de la eficiencia” tras los recortes. Sin embargo, el descontento de muchos usuarios afectados y profesionales es manifiesto e incuestionable. Algunos sectores acusan a los máximos responsables de la sanidad de transformarla en puro negocio logrando, gracias al aumento de las listas de espera, la paulatina privatización encubierta de la sanidad. Y es que éstas preocupan y mucho a los ciudadanos pues se han incrementado de un 12% en 2010 a un 28% en 2016.
“No se gestionan bien los recursos”, “si es algo grave, cuándo el médico nos ve, ya no tiene solución”, “están pasando muchas cosas”… son opiniones vertidas por algunos usuarios a OtroPeriodismo que chocan brutalmente con la realidad de los estudios publicados.
¿La sanidad pública está enferma, se deja morir o todo son meras apreciaciones erróneas de los pacientes?
Periodista.