ActualidadEconomíaEspecial Coronavirus

Comerciantes ambulantes ‘confinados’ y centros comerciales abiertos

La Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas, Fakali, denuncia que las medidas en materia comercial no son ecuánimes con respecto a la del resto de comercios. El colectivo  afirma que “de la noche a la mañana” han tenido que adaptarse a una nueva realidad. Sin embargo, estos esfuerzos están llevando a familias trabajadoras a reducir sus ingresos drásticamente.

Fakali ve ilógicas las medidas, que tachan de discriminatorias para las 41.000 personas que tienen en el mercadillo su única fuente de ingresos en Andalucía. No consideran coherente que el comercio en general tenga una reducción de aforo del 50 por ciento y el cierre previsto sea a las 22:00 horas y, sin embargo, la venta ambulante siga suspendida sin una fecha determinada para su apertura.

Interior de un centro comercial./ Pixabay

Este colectivo se queja de que “tras los meses del confinamiento, la reanudación de la venta ambulante en toda España se dilató en algunos casos con hasta un mes con respecto al resto del comercio”. Destacan que ellas tuvieron que abrir de forma escalonada, mientras que los centros comerciales abrieron en su totalidad. Por ello, estallan ante la ausencia de planes de ayuda para lo que consideran “uno de los oficios con peor imagen social de nuestro país”.

«En Andalucía, 41.000 personas tienen en el mercadillo su única fuente de ingresos»

En base al criterio epidemiológico, la asociación ve carente de lógica que a miles de familias se les impida ejercer su profesión al aire libre. Mientras, los grandes comercios, los cuales desarrollan su actividad en espacios cerrados tienen medidas más laxas en comparación con la venta ambulante.

Para combatir la crisis, Fakali ha lanzado en conjunto con diferentes plataformas de vendedores ambulantes, un paquete de medidas para revitalizar el sector. La situación precaria en la que, dicen, están inmersos aumenta exponencialmente, según el organismo. Una activación del sector podría provocar una simbiosis con actividades como el turismo, como así sucede en algunos países de Europa.

Fakali afirma que es compatible cumplir con todos los requisitos sanitarios y ganarse el pan dignamente. El comunicado finaliza con un ruego para que se apueste por un modelo económico donde la discriminación no golpee siempre a la venta ambulante.

OtroPeriodismo

Revista de información social y comprometida. En Twitter @Otro_Periodismo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *